Ser mamá…
Desde niña elegí ser mamá
Lo sabía mi corazón y mi intuición
Lo que no sabía era lo que es serlo en realidad, porque eso solo se puede experimentar viviéndolo día a día
Y lo que he ido descubriendo es que:
Ser mamá es un regalo
Ser mamá es energía
Ser mamá es autoaprendizaje
Ser mamá es compañía y testigo
Ser mamá es intuición y gozo
Ser mamá es miedo y fortaleza
Ser mama es reír y llorar
Ser mamá es alegría y dolor
Ser mamá es desvelo y vigilia
Ser mamá es transformación y descubrimiento
Ser mamá es dulzura y firmeza
Ser mamá es dedicación y compromiso
Ser mamá es un refugio y puerto seguro
Ser mamá es paz y caos
Ser mamá es amar de manera ilimitada e incondicional
Ser mamá es la segunda oportunidad que te da la vida para ser mejor
Ser mamá es aprender a poner límites cuando más quieres no ponerlos
Ser mamá es saber que tus brazos son la extensión de tu corazón
Ser mamá es sacar fuerzas de donde crees que ya no hay
Ser mamá es soltar todo tipo de control para convertirlo en confianza
Ser mamá es perdonarte tus equivocaciones
Ser mamá es confiar en ti, pero en tus hijos mucho más
Ser mamá es sentir un apachurro en el corazón al verlos sufrir y tener la valentía para hacerte a un lado para que ellos recorran su camino
Ser mamá es descubrirte cada día
Ser mamá es honrar la divinidad que existe en ti
Ser mamá es tocar a Dios
En fin…
Ser mamá es todos estos verbos conjugados y los que faltan por experimentar
Mi práctica más elevada de yoga ha sido la maternidad y mis hijos son mi altar; ese que honro, venero e idolatro
Ser mamá vale la pena, valen las risas, valen las lágrimas, vale la vida, LO VALE TODO
Gracias a mis cuatro quereres por escogerme y hacerme sentir como la mejor MAMÁ, a pesar de mis errores, angustias, enojos y exabruptos.
Y me pregunto… ¿quién le dio la vida a quién?
Que lo sepan: los esperaba desde niña y los amo desde siempre, y SIEMPRE es SIEMPRE.
Gracias a mi madre por regalarme la vida. Te amo mamá
Feliz vida a todas las madres que lo hacen solas, aquellas que están enfermas o imposibilitadas, porque sé que la maternidad les da esa fortaleza que no tiene medida y que está más allá de sus posibilidades.
A aquellas madres, que con su valentía y corazón inmenso, acompañan a sus hijos cuando pasan por algún tema de salud.